El dinero es un componente esencial de la economía, porque nos permite acceder a diferentes bienes y servicios, incrementar nuestro patrimonio y nos permite mantener cierta calidad de vida.
Sin embargo, debes saber que el dinero mismo, como cualquier bien o servicio, también tiene un precio. ¿Suena raro? Si has solicitado un crédito o préstamo, te darás cuenta de que no lo es.
¿Cómo puedes saber el precio del dinero? Las instituciones financieras te lo cobran mediante la tasa de interés. A continuación, te explicamos todo sobre este concepto:
Básicamente, la tasa de interés es el costo que pagamos por acceder al dinero.
La forma más habitual que tenemos las personas de adquirir dinero es pidiendo un crédito, ya sea un préstamo personal, un crédito hipotecario, una tarjeta de crédito, etcétera.
Esos financiamientos son ofertados por diversas instituciones financieras como los bancos o las plataformas de tecnología financiera (fintech).
Sin embargo, estos prestamistas no dan el dinero por caridad, sino que te cobran un porcentaje adicional al monto de dinero que solicitaste para obtener beneficios o ganancias. Ese porcentaje es la tasa de interés.
Supongamos que necesitas un préstamo de 100 mil pesos y acudes a un banco para obtenerlo.
Ese monto tiene que ser devuelto al banco en un plazo determinado, por ejemplo, en 18 meses. Recordemos que esos 100 mil pesos no son tuyos, te los está dando el banco.
Probablemente estarás pensando que, con esas condiciones, harás pagos mensuales de 5 mil 555.55 pesos para devolverle al banco los 100 mil pesos en un año y medio.
En realidad, no es así. Cuando pides 100 mil pesos, debes pagar un costo por tener ese dinero. Ese costo es la tasa de interés.
Hagamos el mismo cálculo, pero con la tasa promedio que ofrecen los bancos por darte un préstamo (45 por ciento anual). En lugar de pagar 5 mil 555 pesos por tu préstamo, la mensualidad será de 8 mil 424 pesos.
Esos casi dos mil 900 pesos mensuales extras son la ganancia o el beneficio que el banco recibe por entregarte los 100 mil pesos, es decir, los intereses que le pagas al banco por acceder a su dinero.
Como acabas de ver en el ejemplo anterior, saber la tasa de interés que te cobra un banco o institución financiera es muy importante para acceder a financiamientos más baratos.
En términos generales, mientras las tasas son más altas, los créditos te cuestan más dinero y menos personas los piden. Si las tasas son más bajas, los créditos tienen un precio menor y, por lo tanto, más personas acceden a ellos.
Para evitar que las instituciones financieras abusen en los cobros de las tasas de interés y mantener la competitividad en el sector financiero formal, existe un organismo central que regula los costos para acceder a los financiamientos: el Banco de México (Banxico).
Para ello, el banco central utiliza la tasa de referencia o Tasa de Interés Interbancaria de Equilibrio (TIIE), un indicador general que utilizan los bancos para determinar los costos de sus financiamientos (tarjetas de crédito, créditos de nómina, hipotecas, créditos automotrices, etcétera).
Al incrementar la tasa de referencia, aumentan los costos de los créditos en general. Al reducirse la tasa de referencia, los costos de los créditos también bajan.
Hoy la TIIE tiene un valor de 8.5 por ciento, el valor más alto de los últimos 16 años.
Hay un tema que debes tener en cuenta acerca de los costos de los créditos en México: sus tasas de interés suelen ser de tasa fija o tasa variable.
La tasa de interés fija es cuando el costo de tu crédito no cambia o permanece inalterable durante el tiempo que lo vas pagando.
Un ejemplo de financiamiento con tasa de interés fija es el crédito hipotecario. No importan las condiciones económicas existentes, estarás pagando los mismos intereses durante el tiempo que dure el pago total de tu préstamo.
En contraparte, un crédito de tasa de interés variable es cuando los costos de ese financiamiento suben o bajan dependiendo de las variaciones de la tasa de referencia de Banxico.
Un ejemplo de financiamiento con tasa de interés variable es la tarjeta de crédito. Cuando la TIIE sube, también se encarece el costo del plástico, de allí que recalquemos la importancia de pagar las mensualidades de tu crédito revolvente a tiempo. De lo contrario, la cantidad de intereses que tendrás que pagarle al banco se incrementará de manera importante.
El costo del dinero en México se expresa mediante un porcentaje anual sobre el monto total prestado. Ejemplo: "te prestamos 50 mil pesos a una tasa de 20 por ciento anual".
Las tasas deben cobrarse conforme a las reglas que establece Banco de México, que incluyen el costo de la tasa de referencia o TIIE.
A su vez, los bancos e instituciones financieras determinan los costos de sus financiamientos de acuerdo al perfil de riesgo de los posibles solicitantes.
Generalmente, ese riesgo lo marca el perfil o historial crediticio de una persona, el cual es calificado a través de una Sociedad de Información Crediticia (SIC).
En el caso de México, la principal fuente que maneja la información relativa al historial crediticio de las personas es Buró de Crédito, que evalúa la capacidad de una persona en cumplir sus obligaciones financieras mediante una calificación numérica, también denominada Score.
Sin embargo, los prestamistas también toman en cuenta otros factores tanto para aprobar la entrega de un crédito como para dictaminar la tasa de interés que van a cobrar al prestatario. Algunos ejemplos son:
Estos y otros puntos relacionados también influyen en la tasa de interés que te cobra un banco, y pueden influir de la siguiente manera:
En términos generales, si tu historial crediticio es muy bueno y no tienes adeudos, es muy probable que la tasa de interés que te cobren sea menor a la de alguien que no cumpla estos requisitos. Las instituciones financieras te verán como alguien capaz de cumplir sus compromisos.
Debido a todo lo anterior, te recomendamos dos cosas: mantener sanos tus niveles de endeudamiento, es decir, que tengas los ingresos suficientes para pagar un crédito sin comprometer tus finanzas personales; e ir creando historial crediticio, por ejemplo, pedir una tarjeta de crédito y pagar los consumos mensuales a tiempo, para acceder a futuros préstamos a una baja tasa de interés.
¿Cuánto pagas de intereses por tus préstamos o créditos? ¿Consideras que las tasas que cobran los bancos son caras o baratas? ¡Déjanos tus comentarios!
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