¿Por qué las cosas que compras son cada vez más caras?, ¿por qué ya no te rinde el dinero como antes?, ¿por qué aumentan los precios, pero no tu salario? Son preguntas que nos hacemos varias veces y tienen parte de su respuesta en un fenómeno llamado inflación.
A continuación, te explicamos todos los detalles sobre un concepto económico de gran importancia e influencia en la economía de los hogares:
Es el incremento generalizado de los precios de los bienes y servicios en una economía, que se da de forma persistente y en un periodo prolongado de tiempo.
Principalmente al poder de compra de las personas, ya que adquieren menos productos que antes porque el dinero perdió su valor.
También los ahorros se ven afectados, precisamente porque al ser utilizados comprarán menos cosas.
Principalmente a las clases media y baja de un país, ya que sus ingresos son menores y no tienen la capacidad para acceder a muchos bienes y servicios básicos. Al encarecerse estos, deben racionar el consumo de varios de ellos para que el dinero les alcance.
Un ejemplo. Según un estudio de investigadores del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA) de la Universidad de Guadalajara, hoy en día se necesitan 11 mil 529 pesos para adquirir 123 productos de la canasta básica.
En contraparte, dos de cada 3 mexicanos con alguna ocupación ganan dos salarios mínimos diarios o menos, es decir, menos de 10 mil 372 pesos mensuales, lo que significa que su sueldo no les alcanzaría para pagar una canasta básica en franco incremento por la inflación.
La principal razón es el crecimiento de la demanda de bienes y servicios de la gente, la cual no puede satisfacerse por la oferta, generando escasez y encarecimiento.
Lo anterior se da mucho con los productos de temporada. Por ejemplo, si hay mucha producción de mangos, su precio es más bajo. Pero en época de escasez, esta fruta aumenta su valor.
Este fenómeno se ha visto con mayor fuerza tras la pandemia del COVID-19. Cuando se reanudó la apertura económica y se abolieron las restricciones de movilidad social, las personas aumentaron la demanda de productos como automóviles o aparatos electrónicos. Sin embargo, las empresas redujeron la producción de estos objetos como previsión ante las afectaciones económicas por la pandemia, por lo tanto, hubo menos productos disponibles para la gente, la demanda superó a la oferta y los precios subieron.
La inflación también sucede cuando los países, empresas o personas dejan de consumir materias primas, bienes y servicios por varios motivos: una economía estancada, la falta de ingresos, etcétera. Un ejemplo es la invasión bélica de Rusia a Ucrania, que derivó en que muchos países dejaran de gastar su dinero en petróleo y gas ruso, elevando los precios de estos energéticos.
También existe un aumento de los precios cuando se presentan estos factores:
Mayor dinero en circulación: al tener más billetes en su cartera, la gente gasta más, la demanda sube y la oferta se ajusta a ese interés incrementando sus precios.
Aumento de la tasa de interés interbancaria: el costo para acceder a créditos es determinado por la tasa de interés interbancaria que fija el Banco de México. Cuando hay inflación, ese indicador también sube y, con ello, suben las tasas y Costo Anual Total (CAT) de las tarjetas de crédito y préstamos bancarios.
Déficit fiscal: de acuerdo con el Banco de México, un déficit fiscal se presenta cuando un gobierno gasta más de lo que ingresa. Al no contar con dinero suficiente para cumplir sus obligaciones, recurre a elevar la disponibilidad de monedas y billetes en la economía de un país. Sin embargo, esto genera un aumento de precios y la devaluación de la propia divisa.
Incremento de gastos de producción: esto se da cuando, al haber aumentos en insumos fundamentales para la producción de bienes y servicios, por ejemplo, el precio del petróleo, las empresas incorporan esos incrementos al precio final para que los consumidores paguen ese encarecimiento y así preservar sus márgenes de ganancia.
Es el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El Inegi registra cada mes los precios de más de 235 mil productos de 46 ciudades del país y los agrupa en 283 conceptos del tipo "Frutas y verduras", "Energéticos" o "Educación".
En resumen, el aumento de los precios genera algunos de los siguientes fenómenos:
- Las personas dejan de comprar algunos productos porque sus ingresos no les alcanzan.
- Suben los costos para acceder a un préstamo o financiamiento, ya que la inflación provoca un aumento en las tasas de interés.
- Aumenta el monto de las deudas bancarias. Esto beneficia en primera instancia a los acreedores, pero suele arruinar a los deudores.
- Las empresas incrementan los precios de sus bienes y servicios para mantener sus márgenes de ganancia.
- Los ahorros pierden valor.
- Se incrementa el costo de vida, entendido como la capacidad de una persona para satisfacer un nivel de bienestar óptimo con sus ingresos.
- Los gobiernos y empresas suelen recurrir a incrementos salariales, ya sea a través del aumento del salario mínimo o por determinación propia de la compañía, para que los trabajadores tengan más recursos para gastar y se mantengan los niveles de consumo en la economía.
Es el incremento de los precios de bienes y servicios cuyos precios son más estables. Es decir, no incluye la medición de precios cuya variación es muy volátil.
Los productos que no se incluyen en la inflación subyacente son:
Alimentos: debido a que muchos de ellos cotizan su precio en mercados internacionales, por ejemplo, el maíz. Además, algunos productos suben repentinamente sus precios por fenómenos naturales como la sequía o las inundaciones.
Energéticos: un ejemplo es el precio de la gasolina, cuyo valor varía de acuerdo con el Impuesto Especial sobre Productos y Servicios (IEPS) que aplique la actual administración federal a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Para los expertos en finanzas, la inflación subyacente es una medición más exacta y fiel a la realidad del aumento de precios, y se suele tomar como parámetro por los bancos centrales para tomar decisiones de política monetaria como elevar o disminuir la tasa de interés interbancaria.
A junio de 2022, la tasa de inflación anual es de 7.99 por ciento, la más alta en 21 años.
Lo anterior significa que los precios en México se están incrementando a niveles muy altos, no vistos desde el año 2001.
El presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió que la inflación seguirá subiendo, por lo menos, hasta el mes de noviembre. Por su parte, el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) calcula que la tasa será superior al 9 por ciento anual a finales de este año.
México no es ajeno a las presiones que han incrementado los precios en todo el mundo tras las medidas sanitarias por el COVID-19. A continuaciones mencionaremos algunas razones que explican la inflación en nuestra nación:
- Presiones a los precios de energéticos y alimentos por la guerra en Ucrania.
- Incertidumbre financiera ante una posible recesión global. De acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el incremento de la inflación en el mundo ha detenido el crecimiento de las economías y pone al mundo en peligro de una recesión, la cual puede darse a finales de 2022 o en 2023.
- La reducción de la inversión privada tanto de empresarios ya instalados en México como de capital extranjero.
- El país se sigue recuperando de los efectos del COVID-19.
En estos meses difíciles para las economías globales, puedes efectuar algunos de estos consejos para reducir el riesgo de que la inflación afecte tus finanzas personales:
- No tengas nuevas deudas de créditos o préstamos, en especial si son de tasa variable.
- Ahorra el pago de intereses bancarios mediante la consolidación de deudas.
- Elabora un presupuesto para registrar tus gastos e ingresos. Esto te ayudará a darle prioridad a la compra de bienes y servicios necesarios, así como reducir los gastos superfluos e innecesarios.
- Compara precios entre diversas tiendas, esto te servirá para identificar ofertas y descuentos.
¿Cómo has notado los efectos de la inflación en tu vida cotidiana? ¿Qué acciones realizas para enfrentar el incremento de precios? ¡Déjanos tus comentarios!
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