¿Cómo empezar a invertir? Guía básica para padres de familia

Si eres padre de familia, es probable que más de alguna vez te haya pasado por la mente comenzar a invertir, ya sea para construir y dejarle un patrimonio a tus hijos o para simplemente tener una vida más tranquila de cara al futuro.

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Sea cual sea tu objetivo, aquí te compartimos una breve guía con los pasos básicos que debes seguir cuando decides comenzar tu recorrido en el emocionante y desafiante mundo de las inversiones, ¡toma nota!

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1. Edúcate en temas de inversión

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Sólo existe algo seguro al invertir: si no te educas al respecto, vas a perder mucho dinero, ¡y ese es un lujo que como padre de familia no te puedes permitir! Formarte en el tema de inversiones no sólo ampliará tu panorama, sino que también te ayudará a formular las preguntas correctas en términos de rentabilidad, plazo, riesgo y liquidez de una inversión, por ejemplo.

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2. Establece tus objetivos

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Como padre de familia es fundamental que tengas claros cuál o cuáles son los objetivos de tus inversiones. Piénsalo por un momento: ¿quieres invertir para la educación de tus hijos, para comprar una casa, para tu retiro, para arrancar un negocio? Definir tus objetivos no sólo te ayudará a tener una mayor claridad, sino que también te ayudará a tomar mejores decisiones.

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3. Determina tu tolerancia al riesgo

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Para definir el riesgo que puedes asumir en tus inversiones tienes que considerar variables como tu situación financiera actual y responsabilidades, así como tu edad y estado de salud. También debes prestar especial atención a factores de riesgo que tú no controlas como, por ejemplo, la pérdida del empleo. No cometas el error de asumir que no enfrentarás imprevistos, también debes considerarlos para definir tu perfil de riesgo.

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4. Define un presupuesto y crea tu portafolio

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Antes de tomar cualquier decisión, define cuánto puedes aportar mensualmente a tus inversiones tomando en cuenta los gastos y compromisos que actualmente tienes. Una vez que tengas definida la cantidad, comienza a crear tu portafolio de inversiones asegurándote de optar por instrumentos que estén alineados con tu tolerancia al riesgo y tus objetivos.

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5. Diversifica

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La diversificación es importante para cualquier inversionista, pero tratándose de un padre de familia se convierte en un factor clave, ya que es la única manera de protegerte contra variables que no están en tu control a corto, mediano y largo plazo. Evita concentrar tu capital en una sola inversión, en lugar de eso, diversifica lo más que puedas. El riesgo es inherente a cualquier inversión, por eso es tan importante diversificar.

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6. Reinvierte y ajusta

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Finalmente, aunque no menos importante, asegúrate de reinvertir, es decir, al término del plazo de cada inversión, invierte tanto el capital como los rendimientos que hayas obtenido, de esta manera tu dinero crecerá cada vez más rápido en un mediano y largo plazo. Y ya que hablamos de plazos, también procura revisar al menos una vez al año tu portafolio para realizar los ajustes que sean necesarios, sea porque tus circunstancias cambiaron o porque no estás consiguiendo los resultados esperados.

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